Es la primera vez que se elabora un vino espumoso con estas variedades blancas mayoritariamente autóctonas riojanas. Se hace una extracción del mosto suave y delicada, que ofrece como resultado un mosto puro y afrutado. Éstos realizan una primera fermentación alcohólica en pequeños depósitos de acero inoxidable y tras un tiempo en sus lías, se realiza la mezcla o cuvée de los vinos blancos mencionados. Este blanc de blancs reposará hasta el mes de enero, fecha en la que se realiza el tiraje y con él la segunda fermentación en botella característica del método tradicional o champenoise. Tras esto las botellas permanecen al frescor natural de los calados subterráneos de la bodega durante 30 meses en contacto con sus lías. Posteriormente, se realiza el degüelle con relleno del propio espumoso para preservar aún más su personalidad. Antes de ponerse en circulación en el mercado permanece con corcho en botellero al menos otros diez meses más.