Este vino posee las variedades de Tempranillo y Graciano que son elaboradas y criados por separado, consiguiendo así preservar la fruta del Tempranillo y poner de relieve todos los complejos matices del Graciano.
Ángeles de Amaren es un vino dedicado a las madres que pretende, con toda su esencia, expresar profunda gratitud a través de unos sabores envolventes, frutales y especiados.